La segunda movilidad dentro del proyecto Erasmus+ “Real Fooding Challenge” ha tenido lugar del 17 al 21 de enero en nuestro país, siendo nuestro centro, el IES VIRGEN DEL ROSARIO, el instituto anfitrión. Estudiantes de Letonia, Polonia y Portugal han compartido una semana junto con estudiantes de nuestro centro y sus familias, aprendiendo de cerca nuestro idioma y cultura, además de realizar actividades relacionadas con la vida saludable. En este proyecto también colabora un centro de Oulu, en Finlandia, pero no pudieron asistir a dicha movilidad debido a las restricciones sanitarias de su país.
El primer día de la visita, los estudiantes de nuestro centro dieron la bienvenida al alumnado extranjero en el SUM, que fue decorado con banderas y cartulinas para la ocasión, y explicaron aspectos de nuestra cultura y gastronomía, además de presentarles nuestro centro. Acto seguido, nuestro director, Bruno Rivera, hizo lo mismo además de realizar un Quizizz muy divertido donde tanto el alumnado español como el extranjero aprendió aspectos importantes de cada país. Después, todo el alumnado junto con sus profesores y profesoras dieron un paseo por el pueblo y visitaron el ayuntamiento, donde el alcalde les recibió. Por último, volvieron al centro y jugaron a Ultimate, uno de los deportes alternativos que recoge nuestro proyecto.
El Segundo y tercer día se dedicaron a visitas guiadas. El martes, el grupo visitó Sevilla, además de visitar los monumentos más destacados de la ciudad, pudieron degustar comida saludable de nuestra gastronomía andaluza. El miércoles viajaron hasta Cádiz, donde lo que más les impactó a los estudiantes letones y polacos fue el océano Atlántico.
El jueves los estudiantes de Erasmus realizaron una ruta de senderismo saliendo andando desde el instituto y recorriendo la Vía Verde hasta Sanlúcar la Mayor, recorriendo una distancia de 8km.
Por último, el viernes, el grupo se desplazó hasta Santiponce, visitando el conjunto arqueológico de Itálica y después San Isidoro del Campo.
Las tardes se dedicaron a que los estudiantes estuvieran con las familias anfitrionas y así conocieran nuestra cultura más de cerca.
Ha sido una semana muy positiva para nuestro centro y desde aquí, nos gustaría dar las gracias a cada una de las familias anfitrionas y el alumnado participante, ya que sin ellos, esta movilidad no hubiera sido posible.













