Carta a la comunidad educativa

Hoy damos por concluido el curso 2019/20 y me gustaría aprovechar para racapitular y evaluar lo que ha supuesto un curso tan atípico para todos nosotros.

El inicio de curso se prometía lleno de retos y proyectos fascinantes: el Erasmus+, los viajes de estudios, las caracolas (que son señal del crecimiento del Centro). Pero en marzo llegó el coronavirus, que lo trastocó todo.

Nuestro objetivo en el fin de semana del 13 y 14 de marzo fue que el IES Virgen del Rosario continuara online. Para ello, hizo falta un esfuerzo inmenso. Todo el profesorado trabajó sin parar para alcanzar un único objetivo: que, dentro del caos que se nos venía encima, nuestro alumnado tuviera una tabla de flotación a la que agarrarse; que las clases siguieran con normalidad, en el horario establecido y que nadie se quedara descolgado.

El primer hito, el de conseguir montar una plataforma digital estable y perfectamente operativa, lo conseguimos gracias al trabajo del claustro del IES Virgen del Rosario, al que nunca podré agradecer lo suficiente el apoyo incondicional desde el primer momento, las horas extra incontables y todas las aportaciones, sugerencias y críticas constructivas. Seguro que hablo también por ellos cuando digo que nunca en nuestras vidas habíamos trabajado con tanta intensidad y tan duramente como desde el 12 de marzo, nunca nos habíamos desvelado tanto por nuestro alumnado y nunca sus problemas se convirtieron tanto en nuestros desvelos.

Luego llegó un segundo hito: el lunes por la mañana, como si fuera la cosa más normal del mundo, más de un 80% de nuestro alumnado estaba conectado delante de su dispositivo a las 8:00. En este caso, tengo que agradecer a las familias, por supuesto, por su enorme esfuerzo y por el interés mostrado. Todo funcionó gracias a que las familias apoyaron desde su casa consultando dudas de configuración, apoyando con mensajes de ánimo y motivando a sus hijos e hijas a levantarse y a trabajar. Además, desde ese día nuestra prioridad fue ir rescatando uno a uno a todo aquel que, por diversas causas, se había quedado fuera: problemas con la conexión, con la configuración de Classroom, con la falta de dispositivos o por la razón que fuera. Por supuesto, el apoyo del AMPA, del ayuntamiento y de los delegados y delegadas de familias ha sido fundamental.

El tercer hito ha venido con los resultados de esta particular tercera evaluación. Y esto se lo tengo que agradecer a nuestro alumnado. Nunca en mi carrera profesional me he sentido tan orgulloso de mis alumnos y alumnas que, en este caso, han demostrado una responsabilidad fuera de toda duda. Si alguna vez ha habido algún problema con el formulario de las 08:00 con el que pasamos lista, he recibido mensajes de alumnado preguntando por él. Si algo ha fallado, ha habido un interés masivo por notificar el problema e incluso por proponer soluciones.

Estoy totalmente convencido de que esta tercera evaluación nos ha hecho a todos aprender muchas cosas, desarrollar nuestra paciencia y, en definitiva, ser más sabios. Por eso, considero que los resultados mayoritariamente positivos han sido merecidos.

Me gustaría agradecer a toda la comunidad educativa del IES Virgen del Rosario, al profesorado y PAS, a las familias (especialmente al AMPA y a delegados y delegadas), ayuntamiento y a nuestro alumnado, por un año verdaderamente duro, pero también emocionante y motivador.

Muy especialmente quiero reconocer a Raúl, Jefe de Estudios, y a José Manuel, Secretario, por sus infinitas horas de trabajo y apoyo.

Gracias.

 

Bruno Rivera Abella

Director del IES Virgen del Rosario (Benacazón)